Suele ser la producción el talón de Aquiles en los discos debut de aquellas bandas chicas con potencial que van de gira por todos los bares gringos.  El caso de Viet Cong, grupo nuevo de Alberta, es entonces entendible (mas no excusable si recuerdan la obra de arte de Ought, los universitarios que nos hicieron el 2014).  Es claro que falta fuerza en los temas más Post-Punk de Viet Cong, así como consistencia en los más Noise.  No obstante, la homónima ópera prima de los canadienses es igual de lo mejor que le pasó a la música en este primer mes de 2015.

Viet Cong arranca con "Newspaper Spoons", un acercamiento a la neo-psicodelia experimental de, por ejemplo, los discos antiguos de Animal Collective.  La diferencia es que aquí no hay un productor con los recursos de Ben H. Allen (encargado de A. Collective), y temas como el primero o el tercero, "March of Progress", realmente necesitan sonar bien para no pasar desapercibidos.  

Con éste último, sin embargo, Viet Cong deja clara su onda.  Los canadienses no tienen tiempo para chistes; saben perfectamente que su reputación depende mucho de las reseñas (ignorando esta), que hacerla linda con tu grupo de Indie hoy en día es anécdota de pocos.  Su discurso lleva entonces un tono muy serio y un aire de lucha.  He ahí donde su Post-Punk encaja a la perfección; Post-Punk en su salsa.

"Pointless Experience", "Silhouttes" y la duradera "Death" son fieles a esa idea.  En esos instantes, el debut de Viet Cong fluye con la naturalidad del de Interpol en 2002.  Si bien este no es de ninguna manera un disco perfecto como el histórico Turn On The Bright Lights, sí triunfa con una fórmula similar: cero cálculo.  Sobre todo en esa grandiosa canción llamada "Continental Shelf".  En fin, la primera prueba en la dura carrera Indie la supera Viet Cong satisfactoriamente.  Disco redondo.

PUNTAJE:  3.5 / 5